El arte de la reparación de dongles USB
Ante un dongle USB roto para nuestros dispositivos inalámbricos, la mayoría de nosotros probablemente desecharía la pieza y pediría un reemplazo, después de todo, el tamaño diminuto de esas cosas probablemente signifique una reparación difícil o imposible, ¿verdad? Bueno, [The Equalizor] lo tomó como un desafío y aprovechó la oportunidad para practicar sus habilidades de soldadura microscópica solo por diversión.
El adaptador inalámbrico en cuestión, que provenía de uno de sus clientes que lo dobló accidentalmente mientras estaba conectado a una computadora portátil, se negó a ser reconocido por una computadora bajo ninguna circunstancia. Después de deslizar la carcasa de metal para el conector USB y romper la carcasa de plástico, [The Equalizor] descubrió que el exterior ligeramente doblado escondía una placa de circuito impreso profundamente agrietada. Luego, con una inspección de las huellas cortadas y los componentes levantados, era simplemente una cuestión de reflujo de soldadura unas cuantas veces para intentar que la placa volviera a estar completa. Una vez que se confirmó que el dongle funcionaba, se imprimió una nueva carcasa 3D para reemplazar el original que tuvo que ser roto.
Puede que a algunas personas no les parezca extraordinario, pero este video es un buen ejemplo para mostrar que las reparaciones de dispositivos electrónicos delicados en una escala tan pequeña son factibles y pueden servir para reducir la cantidad de desechos electrónicos que arrojamos constantemente. El hecho de que algunos dispositivos electrónicos parezcan abrumadoramente elaborados o irrecuperables no siempre significa que no haya luz al final del túnel. Puede ver el trabajo realizado en este pequeño dongle después del descanso.